Xoán Leiceaga Baltar

POESÍA

81

Cautiva, me dices
«Por ti, te dejaría arrancarme la piel».
Mas mis dedos eran yemas, sin garras de desgarrar.

82

Contigo, primicia de piedra.
Brusco fue el cisma contra mi fe de papel:
te abracé, me fugué a través de tu carne, abandoné la quimera.

83

Ni siquiera tú has podido contemplarte en el origen.
Génesis que, deslizadas tantas leguas
nos colma con la inocencia.

84

Lentamente, acariciame la nuca con tu mano izquierda.
Lenta, posa tu mano derecha en mi pecho.
Lenta resbala, y lenta déjate ir.
Lenta, lenta ya es todo.

Volver